La terapia neural es una técnica de medicina alternativa que cada vez gana más popularidad. Basada en la regulación del sistema nervioso, busca tratar enfermedades crónicas y agudas a través de la aplicación de estímulos específicos. Pero, ¿qué significa realmente la terapia neural? En este artículo te lo explicamos de forma sencilla.
¿Qué es la terapia neural?
La terapia neural es un tratamiento médico que utiliza microinyecciones de anestésicos locales (como la procaína) en puntos específicos del cuerpo, especialmente en el sistema nervioso autónomo. Su objetivo es restaurar el equilibrio energético y funcional del organismo.
Esta técnica fue desarrollada en Alemania a principios del siglo XX por los hermanos Ferdinand y Walter Huneke. Desde entonces, ha sido adoptada en diversos países como parte de la medicina integrativa.
¿Cómo funciona la terapia neural?
La base de la terapia neural radica en el concepto de "campos de interferencia". Estos campos son zonas alteradas (como cicatrices, traumatismos o infecciones) que afectan el funcionamiento normal del sistema nervioso. Al estimular estas áreas con inyecciones de procaína, se busca: Neutralizar bloqueos en la comunicación nerviosa. Restablecer la autorregulación del cuerpo. Reducir la inflamación y el dolor. Mejorar la respuesta inmunológica.
¿Para qué sirve la terapia neural?
La terapia neural puede ser útil en el tratamiento de una amplia variedad de condiciones, entre ellas: Dolores crónicos (lumbalgia, migrañas, fibromialgia). Trastornos autoinmunes. Alergias y asma. Problemas digestivos como colitis o gastritis. Desequilibrios emocionales (ansiedad, depresión). Importante: La terapia neural no sustituye tratamientos médicos convencionales, sino que puede complementarlos de manera segura bajo supervisión profesional.
Conclusión
La terapia neural es una poderosa herramienta de la medicina integrativa que promueve la autorregulación natural del cuerpo. Si buscas una alternativa para mejorar tu salud de forma más natural, podría ser una opción a considerar.
Recuerda que cada organismo es único, por lo que es fundamental recibir una valoración personalizada.